La persona que decidi retratar es mi madre, Quintina, la quinta hija de una numerosa familia en Camargo, Bolivia,  tiene 50 años, es una mujer alegre, muy divertida, que le gusta hacer sus cosas con musica originaria de su pais de fondo a volumen alto, acompañando con su canto en  voz alta y porque no bailar un poco. Sin embargo tambien tiene un caracter fuerte cuando se enoja o se estresa, donde es mejor no desafiarla, pero tambien como todas las personas tiene sus demonios, cosas que la ponen triste y al ser una persona transparente es muy notorio cuando esta en ese estado, pero a pesar de todo eso todes quienes la conocemos la vemos siempre mas animada que todo lo anterior. 

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Al retratarla quise poner en foco su rostro y lo que puede decir o transmitir con este, dar cuenta de sus pronunciados pomulos, sus ojos pequeños algo achinados, con parpados caidos sobre estos, sus labios al natural con un tono mas oscuro en los contornos y su piel con las marcas de los años vividos, dando cuenta de por asi decirlo, de su raza, una mujer proveniente de pueblos originarios, la cual a traves del tipo de su ropa y sobre todo del sombrero que lleva puesto representa a su cultura, la cual permanece viva en ella a pesar de estar décadas alejada de su pais de origen.

Su cultura se basa en el culto a la pachamama, crecio practicandola junto a sus padres quienes se la inculcaron, quise traer algo de eso tambien mediante el uso de una paleta de colores que van desde los rosas, los negros y sobre todo los marrones, color que remite a la tierra, a lo rustico, poniendolos en juego para asi crear una imagen profunda.

Podemos hablar tambien de sus habitos, esa piel brillante, hidratada, de una persona que se preocupa por su imagen ya que tampoco se ven arrugas pronunciadas en el rostro, sin embargo no lleva maquillaje, y su pelo esta al natural, mostrandose como una persona sencilla. 

Fue mi intension usar luz natural para generar esa frescura en la imagen, evitando cualquier artificialidad, decidi que esta ilumine desde la derecha a mi persona, por un tema estetico que he visto en cuadros pero sin generar sombras duras, sino mas suaves, porque sentia que esas sombras duras transmitirian otros sentidos que no queria que se transmitan, sino mas bien aportar a la imagen de persona simpatica.

Con respecto al primer plano, quise simplemente poner en foco el rostro, con la mirada a camara de mi madre interpelar al espectador y develar su persona.

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